Hoy el Día de las Madres se siente distinto… más silencioso, más profundo. Hace cinco meses te fuiste, pero tu presencia sigue aquí, tan viva en mí, en nosotros, en cada rincón de esta familia que formaste con tanto amor. Fuiste mucho más que una mamá: fuiste alegría, fuerza, humildad, ternura. Tenías esa capacidad de hacer sentir bien a todos con solo una mirada o una risa tuya. Nos enseñaste con el ejemplo, sin discursos ni exigencias, lo que significa ser noble, generosa y valiente. Aunque tu ausencia duele, tu recuerdo abraza. Aunque ya no estás físicamente, te siento en cada decisión que tomo, en cada gesto cotidiano, en los pequeños momentos donde el alma se detiene y dice: “esto me lo enseñó mamá.” Gracias por tanto, mami. Por el amor inmenso, por la entrega sin límites, por dejarnos tu luz para cuando todo se oscurece un poco. Hoy, más que nunca, celebro haberte tenido… y sigo amándote como siempre. TE AMARÉ TODA LA VIDA, Y UN POQUITO MÁS❤️🩹🕊️.